miércoles, 27 de octubre de 2010

En tu cama

En tu cama,
Hazme prisionera,
Enrédate conmigo,
Hazme lo que quieras.
Desliza unas de tus manos febrilmente
Y con la otra sostenme firmemente,
Que tu lengua dibuje contornos sobre mi cuello,
Y que las llamas nos consuman en un destello
Susúrrame cosas bien calientes,
Que me hagan enloquecer,
Apriétame desaforadamente
Que no me voy a contener.
En tu cama,
Desgarra cada centímetro de mi ser,
Ahógame entre caricias ardientes,
Que tus dedos recorran mi vientre,
De la manera más indecente.
Que tus brazos me torturen de pasión,
Y que mis gritos se vuelvan una canción,
Demuéstrame todo a lo que te puedas atrever,
Juguemos sin cesar hasta ya no más poder.
En tu cama,
Hazme tu esclava una y otra vez,
Que en tu cuerpo muero por yacer,
Consumida entre el deseo y el placer.
En tu cama,
Quiero vivir las fantasías más oscuras
Que se me antojan solo contigo,
Quiero perder total cordura
Y que accedamos a lo prohibido.
En tu cama,
Desnúdame y hazme estremecer,
Que mi cuerpo vibre con tu calor,
Que mi boca sobre tu miembro
Pierda su control,
Que mis manos se enciendan
Y se bauticen con tu sudor.
En tu cama
Quiero perder la decencia,
Quiero saborear tu esencia,
Quiero gemir en tu oído sin parar,
Que me hagas llegar y luego desmayar.
En tu cama,
Quiero que me acorrales
Entre llamas de excitación,
Que los jadeos resuenen
Por toda la habitación,
Que mi corazón se acelere
Ante toda provocación,
Que nuestros cuerpos
Rumoreen los secretos
De la perversión…




No hay comentarios:

Publicar un comentario